Di mi nombre como si fuese la última vez y vive hoy como si fuese la última noche. Y aunque me den ganas de llorar, por lo menos se que estamos bien. Porque yo estoy contigo y tu conmigo.
Tú y yo podríamos dominar el mundo algún día, agarrados de la mano, si tu quisieras...
Mariposas, mariposas y más mariposas que estaban destinadas a volar a nuestro alrededor. Tu y yo, juntos toda una vida. Lo único que merece la pena es el recuerdo de mantenerte vivo en mi mente y en mi corazón, saber que te tengo, de una manera o de otra, pero te sigo teniendo junto a mi. Prométeme que siempre me vas a recordar y que nunca te olvidarás de mi, que seguiré contigo siempre y que me querrás.
Vuelven aquellos tiempos en los que miraba hacía atrás, en los que te recordaba como el primer día y me hacías sentir viva. Pero no me arrepiento de haberte conocido. Me has hecho cambiar de una manera muy especial y eso me gusta. El recuerdo de haberte conocido es lo que me mantiene en pie en estos momentos y eso es lo que más necesito justo ahora. Ahora toca vivir mi vida, ser felíz y pensar que ya llegarán tiempos mejores. ¿Quién sabe que sucederá en un mañana? Lo que si se esque me gustaría pasarlo contigo, y decir que eres increíble.
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