Algo entra sin percibirse debajo de nuestra puerta. El silencio empapa el piso sin darnos cuenta y pellizca como una piedra en mis zapatos. Hay algo que está estropeando el pegamento ha estado atándome a tí durante todo este tiempo.
Siento como si ya no te conociera. He estado equivocada y siempre he estado ahí, demasiadas veces a tu lado ayudante cada vez que te caías a levantarte, a tenderte mi mano cada vez que lo necesitabas. De algún modo hemos sido desconectados el uno del otro y, en estos momentos, hay una pared entre nosotros que nos separa de lo que hemos sido en otro tiempo.
Pensé que el amor aguardaba en casa, pero ahora, tú andas tapando ventanas para engañar. Esto es tan duro...
De repente veo cambiar el paisaje en mis ojos. Nada se parece a la forma como lo hacía antes, ya no se donde mirar ni que buscar. He estado tan equivocada y, sin embargo, he estado tantas veces a tu lado, que ya es cuestión de costumbre el ser un tanto masoquista...
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